PORTUENSE: Simeón; Guelfo, Hermida, Quintero, Muñoz Rivas, Reales, Alvarez (Nino), Javier, Calzado, Suano (Germán) y Manolín.
MALLORCA: Reus; Sauquillo, Chea, Ferrere, Iriarte, Bonet, Collantes, Orellana, Nadal (Andrés Mir), Gallardo y Lizoain.
ÁRBITRO: El colegiado castellano Sánchez Moreno. Mostró tarjetas amarillas a Sauquillo y Ferrere del Mallorca y a Alvarez del Portuense.
El Portuense se presentaba con las bajas de los jugadores Barrientos y Solano, así como del entrenador Manolo de la Torre, todos ellossancionados con nueve partidoscomo consecuencia de los incidentes producidos en el partido Portuense-San Fernando del Trofeo Ciudad del Puerto.
El Mallorca aprovechó esta merma de los locales, así como la circunstancia del viento a su favor en el primer tiempo, para imponenerse en el marcador. En el minuto 43 marcó Lizoain el 0-1 a centro de Orellana, en el 13 del segundo tiempo empataba Hermida, con un trallazo desde fuera del área y en el minuto 22, en pleno desconcierto local, Gallardo se internó y adelantó a su equipo, mientras el defensa Quintero se hallaba tendido en el suelo.
(Mundo Deportivo del 7 de septiembre de 1980)