Antonio Chas (1915-1980)

Antonio Chas Veira nació en Culleredo (La Coruña) el 14 de marzo de 1915.
Chas, de importante físico, alto y robusto, era un delantero centro curtido y fogueado, dispuesto a dar batalla ante los mejores defensas del fútbol español.
Era conocido como "el ariete impetuoso", sufriendo dos fracturas de clavícula. Su fuerte era el remate de cabeza. Continuamente aparecía volando por el área cual misil. Este goleador de enorme remate de cabeza como su gran cualidad, y no exento así mismo de dos piernas, que lanzaban auténticos torpedos hacia las porterías rivales.

Con 14 años juega en el modesto Galicia Sport Club, fijándose inmediatamente los técnicos del RC Deportivo de la Coruña, que no tardan en ficharlo, para, tras dos años en sus filas, cederlo primero al RC Celta y seguidamente al Club Lemos de Monforte.
En el Celta, Chas jugó 10 partidos en la temporada 1932-33. Debutó el 25 de septiembre de 1932 en Balaídos en la 2ª jornada de liga regional, en la que el Celta venció al Eiriña (2-1). Jugó su último partido el 16 de abril de 1933, en la vuelta de dieciseisavos de la Copa contra el Zaragoza en el campo de Torrero. El Celta empató a uno, adelantándose a los 20 minutos con gol de Chas, resultado insuficiente para levantar el (2-3) que encajó en Balaídos una semana antes.

Consiguió otros dos goles más (uno en cada competición). El de Liga Regional fue en la tercera jornada contra el Racing de Ferrol en Balaídos (2-1), el 2 de octubre de 1932. Su gol fue el inicial del partido. El de Liga de 2ª división lo obtuvo en la jornada 13, el 19 de febrero de 1933; (2-1) a favor del Celta. En esta ocasión nuevamente su gol es el primero del partido.

Antes de comenzar la campaña 34-35, regresa RC Deportivo. En la temporada 35-36, se va al Racing de Santander, donde lo consideran uno de los mejores delanteros que han jugado nunca en el equipo cántabro.

Aquel Racing de Chas parecía que iba a dar muchas alegrías para Cantabria, pero la Guerra Civil se encarga de todo lo contrario, muriendo dos de los titulares en la misma, Milucho y Cisco. Así mismo, Arauna y el mítico Enrique Larrínaga marchan al extranjero. En pleno acontecimiento bélico, Chas marcha a Barcelona, donde se recupera de una grave lesión. Llega incluso a jugar con la Selección de Cataluña, y se proclama campeón de Catalunya con el Espanyol antes de volver a Coruña, donde además del Deportivo, también juega unos amistosos con el Racing ferrolano.

Tras la guerra vuelve a jugar en el Racing de Santander pero el equipo estaba desquebrajado y la falta de jugadores, hizo que descendiesen por vez primera a 2ª división. Ante este panorama, se traspasa a Chas al RCD Espanyol, equipo que venía años atrás intentando de nuevo su fichaje. Se proclama subcampeón de Copa en 1941 ante el Valencia CF, jugando dos campañas a gran nivel con los de Sarriá.

Después marcha al Real Oviedo, donde juega cuatro campañas antes de retirarse en el Real Murcia, tras pasar por la minera localidad de Mieres, cedido por el Real Oviedo al Caudal Deportivo. Chas, un tipo sencillo y bonachón, decide abandonar el fútbol, marchando a su Galicia natal, a la que no podía olvidar tras prácticamente doce años fuera de ella.

Allí formó su familia y puso un negocio hostelero en la coruñesa localidad de San Pedro de Nos. Finalmente, el 11 de octubre de 1980, Antonio Chas Veira nos dejó para siempre.

Edmundo Suárez (1916-1978)

Edmundo Suárez de Trabanco (Baracaldo, Vizcaya, 22 de enero de 1916 — Valencia, 14 de diciembre de 1978) fue un futbolista y entrenador de fútbol español. Jugaba como delantero y la mayor parte de su carrera transcurrió en el Valencia C. F., excepto la última temporada que la disputó en las filas del C. D. Alcoyano.

Mundo es todo un símbolo en el Valencia C. F. ya que es el máximo anotador histórico en liga con este equipo logrando dos trofeos Pichichi. Además es el octavo máximo goleador de la liga española, sólo superado por hombres de la talla de Zarra, Alfredo Di Stéfano, Hugo Sánchez o Raúl González.
Dotado de una gran corpulencia física y un fuerte carácter que le hacía pelear por todos los balones, fue sin duda una de los grandes dominadores de las áreas españolas en la década de los 40. Junto con Epi, Amadeo, Asensi y Gorostiza formó la delantera eléctrica, que transformó al Valencia C. F. en un equipo ganador.
Militó en varios equipos amateurs en su País Vasco natal, pero la llegada de la Guerra Civil cambió totalmente su carrera. Fichó por el Athletic Club, pero al realizarse esta incorporación en territorio republicano no fue considerado válido por el régimen franquista por lo que al finalizar la guerra quedó libre. En el año 1939 el ejército franquista creó un equipo, el Recuperación de Levante, del que formaron parte diversos jugadores que habían batallado en la región militar de Levante. Dicho equipo fue el elegido por el Valencia C. F. para debutar después de la contienda. El Valencia C. F., tras verlo en acción, no desaprovechó la oportunidad y lo fichó.
Tras este rocambolesco fichaje, Mundo permaneció en el Valencia durante once temporadas, las comprendidas entre 1939-40 y 1949-50. En ellas se destacó como un consumado goleador consiguiendo un promedio de 0'92 goles por partido a lo largo de toda su carrera en el Valencia. Gracias a ello logró el Trofeo Pichichi en las temporadas 1941/42 y 1942/43, con veintisiete y veintiocho goles respectivamente.
Tras una temporada en la que apenas disputó seis partidos, decidió salir del club de toda su vida para enrolarse en el cercano y modesto C. D. Alcoyano que también competía en la Primera División. Allí permaneció únicamente la temporada 1950/51 compitiendo a un aceptable nivel.

Sin embargo, no se acabó ahí su relación con el Valencia. Mediada la temporada 1963/64 se hizo cargo del equipo en condición de entrenador sustituyendo a Pasieguito, otro mito del valencianismo. Gracias a su fuerte carácter y rigidez —llegó a declarar que habíán perdido partidos por falta de valor o que debían renovar totalmente la delantera— consiguió remontar puestos en la liga, acabando en la sexta posición. Por el contrario, la actuación del equipo en la Copa de Ferias fue mucho mejor, disputando la final, que perdió contra el Real Zaragoza en un polémico partido. Tras la buena actuación de ese año, la directiva del Valencia C. F. confió en él otro año más como entrenador acabando la liga en cuarta posición. Sin embargo, a pesar que el club dio por bueno su trabajo, se decidió por fichar a otro entrenador, Sabino Barinaga. No obstante, como los resultados no le acompañaron, Mundo retornó a su antiguo puesto mediada la temporada.
La temporada 1966/67 la inició como entrenador logrando un rotundo éxito al obtener la Copa del Generalísimo imponiéndose en la final al Athletic Club por 2-0. Su carrera como entrenador en el Valencia C. F. continuó hasta el 13 de octubre de 1968, momento en que fue destituido por los malos resultados.

Fue internacional con la selección española en un total de tres ocasiones anotando tres goles. Debutó el 28 de diciembre de 1941 ante Suiza.

Tras su retirada se le solía ver en su bar de la calle D.Juan de Austria en Valencia ante las miradas de los curiosos.

Agustín Jarabo (1911-?)

 

Agustín Jarabo Domínguez nació en Orense el 11 de octubre de 1911.

 

Agustín entró a formar parte de la plantilla del Real club Celta en la temporada 1935-36, la del primer e histórico ascenso a primera.

Pronto dejó constancia de su facilidad goleadora, ya que en esa temporada del ascenso anotó cinco goles en la fase regular, y siete en la fase de promoción, convirtiéndose en el segundo máximo goleador del equipo tras Nolete. Uno de esos goles lo anotaría en el definitivo partido del ascenso frente al Jerez.

Pero como es sabido, la Guerra Civil española paralizó todas las competiciones desde julio de 1936, y la mayor parte de los futbolistas del Real Club Celta fueron movilizados con sus reemplazos e incorporados a unidades de combate. Así, Agustín sería soldado de infantería en Asturias y Extremadura. Terminada la guerra y licenciados muchos de los jugadores célticos, el club vigués volvía a ejercer como tal, y por fin podría disfrutar de la primera división del futbol español.

 

Agustín debutó en la primera división, vistiendo la elástica celeste, en la segunda jornada de la liga 1939-40, el 10 de diciembre de 1939, en Balaidos frente al FC Barcelona. Esta primera temporada del Celta en primera fue bastante buena para Agustin, que con catorce goles se convirtió en el pichichi del equipo. Sus principales compañeros de delantera en esta época eran Toro y Nolete, dos históricos del Celta.

Agustín participó en muchos de los partidos que fueron quedando para la historia en estas primeras décadas de vida del Celta. Así participó en el famoso partido de promoción frente al Deportivo en mayo de 1940, en la famosa victoria por 8-0 al Deportivo en eliminatoria copera en abril de 1941, o el primer Celta-Depor en primera división (2-1), en el que anotó los dos goles de la victoria celeste.

 

La campaña 1941-42, Agustín formó un gran tridente con los canarios Del Pino y Roig, ya que en una sensacional temporada del equipo, que terminó 5º, se repartieron entre los 3, cuarenta goles. Pero tras la nefasta temporada 1943-44, en el que el equipo solo consigue nueve puntos y vuelve a segunda, Agustín, Alvarito y Mundo, deciden dejar el Celta al no llegar a un acuerdo con la directiva.

Con su marcha deja el recuerdo del sensacional goleador que fue en los primeros años del equipo vigués en la primera división.

Guillermo Campanal (1912-1984)

Guillermo González del Río (Avilés, 9 de febrero de 1912 - Sevilla, 22 de enero de 1984), conocido deportivamente como Guillermo Campanal o Campanal I, fue un futbolista español. Está considerado como el mejor delantero centro de la historia del Sevilla FC, donde formó parte de la llamada delantera stuka. Es el máximo goleador de la historia del club andaluz, con 214 tantos.
Inició su carrera profesional en el Sporting de Gijón, club con el que participó en la primera edición de la Segunda División de España, en 1929. Para la temporada 1929/30, con 17 años, fichó por el Sevilla FC, que por entonces luchaba por ascender a Primera.
En sus primeros años en Sevilla tuvo que conformarse con varios títulos menores, como dos campeonatos regionales de Andalucía. Además, en 1933 se perdió prácticamente toda la temporada al tener que cumplir el servicio militar.
A su regreso, la temporada 1933/34, comandó al Sevilla al ansiado ascenso a la Primera División. El calendario de esa temporada había dispuesto para la última jornada un enfrentamiento entre los sevillistas y el Athletic de Madrid y ambos clubes llegaron al partido luchando por el ascenso. Campanal logró uno de los dos goles de la victoria del Sevilla FC, que se proclamó campeón de la categoría de plata. En total, esa temporada el delantero asturiano jugó 17 partidos, en los que anotó 28 goles, la mitad de los conseguidos por su equipo. Su buena temporada se vio también recompensada con la llamada del seleccionador español, que le convocó para el Mundial de Italia.
A partir de ese momento se inició una década de éxitos para el Sevilla FC –interrumpida temporalmente por la Guerra Civil- y en la que Campanal fue uno de los principales protagonistas.
La temporada 1934/35, la debut del Sevilla FC en Primera División, el club hispalense logró el primer gran título de su historia, al conquistar el Campeonato de España, actual Copa del Rey. Los andaluces se impusieron en la final al CE Sabadell por 3-0, anotando Campanal los dos primeros goles de la victoria.
En 1936 las competiciones quedaron interrumpidas por la guerra, hasta 1939. Ese mismo se retomaron algunas competiciones, como el Campeonato de España, jugado como Trofeo del Generalísimo. El Sevilla se impuso en la final del torneo al Racing de Ferrol por un contundente 6-2, con un hat-trick de Campanal. Era el nacimiento de la considerada mejor delantera de la historia sevillista, los ''Stuka'', integrada, además de Campanal, por López, Pepillo, Raimundo y Berrocal, aunque en ocasiones Torrontegui sustituía a Pepillo.
En la liga de la temporada 1939/40, el Sevilla acabó subcampeón; un empate en la última jornada le hizo perder un título que prácticamente tenía asegurado.
La temporada 1940/41 el Sevilla terminó la liga en quinta posición, aunque la delantera andaluza exhibió su poder realizador, al terminar el campeonato como el equipo más goleador: 70 tantos en 22 partidos. A ello contribuyeron resultados como el 11-1 ante el FC Barcelona, la mayor goleada de la historia del Sevilla en Primera, en la que Campanal logró con cinco dianas. El delantero asturiano, que finalizó la temporada como máximo anotador del equipo -17 goles en 18 partidos- tuvo otras tardes destacadas, como el hat-trick logrado en la victoria por 10-3 ante el Valencia CF o dos de los cinco goles que los sevillanos le endosaron al Real Madrid.
La campaña 1941/42 Campanal volvió a ser el máximo anotador de su equipo, con 17 tantos en 25 partidos. Entre sus tardes más recordadas, los cinco goles que le hizo al RCD Español –el partido terminó 6-0- o los dos tantos con los que contribuyó al triunfo por 10-0 sobre el Real Oviedo.
La temporada 1942/43 los registros goleadores de Campanal, ya con 30, empiezan a declinar: diez goles en 19 partidos; pese a todo, el Sevilla terminó la liga como subcampeón.
La siguiente temporada el Sevilla volvió a pelear por el título, finalizando la liga en tercera posición. Con la llegada de nuevos delanteros como Juan Arza y, posteriormente, Araujo, el papel de los veteranos iba pasando a segundo plano. Campanal participó en 16 partidos y anotó seis goles, destacando un hat-trick en la victoria por 5-3 ante el Real Madrid.
Repitió estadísticas similares en la siguiente temporada, con seis goles en 14 encuentros. En su última campaña en activo, la 1945/46, vivió la histórica conquista del primer y hasta la fecha único título liguero del club. Campanal tuvo un papel testimonial, participando en cuatro partidos y anotando dos goles, uno de ellos decisivo para empatar ante el Real Madrid.
Campanal se retiró como el jugador con más años de permanencia en el Sevilla FC: 17 temporadas. Estableció, así mismo, un registro goleador todavía vigente: 214 tantos con la camiseta del sevillista. Colgó las botas siendo el máximo anotador de la historia del Sevilla FC en Primera División con 101 goles -marca luego superada por Juan Arza-, en Segunda División con 75 goles y en la Copa de España; estos dos últimos registros todavía vigentes.

Tras retirarse de los terrenos de juego, obtuvo el título de entrenador, y en noviembre de 1946 se puso al frente de CD Málaga. Posteriormente, trabajó para otros equipos como el CD Alcalá de Guadaíra y el Coria CF, que era filial del Sevilla. Ello propició que la temporada 1949/50 regresara al club hispalense para reemplazar en el banquillo a Ramón Encinas. Se mantuvo al frente del equipo durante cuatro campañas y logró su mayor éxito deportivo con el subcampeonato de liga de la temporada 1950/51. Como ya había vivido como jugador, el Atlético de Madrid le arrebató el título a los sevillanos en la última jornada del campeonato.
En esta etapa al frente del equipo, Campanal también hizo debutar a su sobrino, Marcelino Vaquero, que con el nombre de Campanal II se acabaría convirtiendo en uno de los jugadores legendarios del Sevilla.
En 1953 dejó el equipo en manos de Helenio Herrera, aunque tuvo que regresar al banquillo la última jornada de la temporada 1956/57, tras ser apartado el mago de la dirección del equipo. Campanal logró un valioso empate ante el FC Barcelona -ambos peleaban por la segunda plaza- con lo que el Sevilla FC se proclamó subcampeón de liga y se clasificó para la Copa de Europa, ya que el campeón de Primera, el Real Madrid, lo era también del torneo continental.
Finalizada la temporada, el verano de 1957 Campanal dirigió también al equipo en una gira por América del Sur, donde participó en la Pequeña Copa del Mundo. Luego, cedió el banquillo a Satur Grech para la nueva temporada.
Falleció el 22 de enero de 1984, con 71 años, como consecuencia de un paro cardiaco.

Fue internacional con la selección de España en tres ocasiones. Cuando todavía jugaba en Segunda División, Amadeo García de Salazar le convocó por primera vez con motivo de la disputa de la Copa del Mundo de 1934, que suponía el estreno de España en una cita mundialista.
El debut de Campanal con la roja tuvo lugar el 1 de junio de 1934, en el partido de desempate de cuartos de final contra Italia, en el que se impusieron los amfitriones.
No regresó a la selección hasta 1941, año en que disputó dos partidos amistosos, ambos contra Portugal, y en los que anotó sendos goles.

Victorio Unamuno (1909-1988)

Víctorio Unamuno Ibarzabal nació en Vergara (Guipúzcoa) el 21 de mayo de 1909. Jugaba de delantero, su primer equipo fue el Athletic Club y ganó un campeonato de liga con el Real Betis Balompié.
Este jugador era el delantero centro típico rompedor con un buen remate de cabeza. Comienza a jugar en el club de su localidad natal: el Aurrerá de Bergara, y de allí pasa al Deportivo Alavés y posteriormente al Athletic,  entonces el club  más poderoso de España y con el que gana 2 Ligas (1929-30 y 1930-31) y 4 Copas (1929-30, 1930-31, 1931-32 y 1932-33).
Jugó en el Athletic y en el Betis. Debuta en la Primera división de la liga española de fútbol el 10 de febrero de 1929 en el partido Real Sociedad 1 - 1 Athletic. Fue en la primera jornada de la primera liga española de fútbol, con lo que Unamuno se convirtió en uno de los jugadores que formó el primer once inicial en Primera división del Athletic.
Como hemos dicho, con el Athletic ganó dos Ligas y cuatro Copas. Fue especial el campeonato de liga de la temporada 29-30, ya que fue el primer título de liga de la historia de su club.
Pero en el club bilbaíno comienza a destacar otro magnífico delantero centro: Bata, quien termina por arrebatarle la titularidad.
De cara a la campaña 1933-34 el Betis se plantea su contratación, lo que se realiza mediante unas cuotas extraordinarias que pagan los socios para poder realizar el fichaje, valorado en 25.000 ptas.
En el Betis Unamuno estará 3 campañas, siendo el máximo goleador del equipo en las dos primeras.En la segunda temporada es uno de los integrantes del equipo que se proclama Campeón de Liga. Ese título de Liga es el primero y el único que ganó el Betis. En la última, 1935-36, es relegado en varias ocasiones a la suplencia ante la pujanza de otro joven delantero: Paquirri.
La difícil situación económica por la que pasa el Betis al final de esta temporada, y el hecho de tener cubierto el puesto de delantero centro con Paquirri, propicia que el propio jugador compre su carta de libertad para volver a fichar de nuevo por el Athletic Club.
Después de la guerra, en 1939 regresa al Athletic donde permanece tres temporadas antes de retirarse. En este periodo Unamuno consigue un Trofeo Pichichi al marcar 20 goles en la temporada 39-40.
Unamuno jugó un total de 144 partidos en Primera división y marcó 101 goles.
Se retiró en 1942. Falleció en Durango en 1988.